Reclamar por mala praxis en Clínicas Dentales

La visita al dentista es una rutina para muchos, necesaria para mantener una buena salud bucodental. Sin embargo, en ocasiones, estos tratamientos no salen como se espera y pueden derivar en problemas mayores debido a la mala praxis. En estos casos, es importante conocer los derechos del paciente y cómo proceder para reclamar. Este artículo abordará cómo reclamar por mala praxis en clínicas dentales en España.

¿Qué es la mala praxis en clínicas dentales?

La mala praxis se refiere a una actuación incorrecta o negligente por parte de un profesional de la salud que provoca un daño al paciente. En el contexto de la odontología, Esta puede manifestarse de diversas formas, incluyendo:

  • Diagnóstico erróneo
  • Tratamiento inadecuado
  • Falta de consentimiento informado
  • Infecciones derivadas de una mala higiene
  • Daños permanentes en dientes o encías

Normativa aplicable

En España, la normativa que regula la responsabilidad profesional y las reclamaciones por mala praxis es extensa. Entre las más relevantes encontramos:

  • Ley 44/2003, de 21 de noviembre, de Ordenación de las Profesiones Sanitarias: Esta ley establece las bases para la ordenación de las profesiones sanitarias y los derechos y deberes de los profesionales y pacientes.
  • Ley 41/2002, de 14 de noviembre, básica reguladora de la autonomía del paciente y de derechos y obligaciones en materia de información y documentación clínica: Esta ley establece el derecho de los pacientes a recibir información sobre su estado de salud y los tratamientos propuestos, así como a dar su consentimiento informado.
  • Código Civil (CC): En casos de mala praxis, también pueden aplicarse artículos del Código Civil en lo referente a la responsabilidad civil por daños y perjuicios (artículos 1902 y siguientes).
  • Código Penal (CP): Del mismo modo, cabe la aplicación del Código Penal en casos de negligencia grave que provoque lesiones o la muerte del paciente. En este sentido, sus artículos 149 y 152 regulan los delitos por lesiones y los daños causados por imprudencia profesional.

Pasos para reclamar por mala praxis

     1. Reunir documentación y evidencias

Lo primero que debe hacer un paciente que sospecha haber sido víctima de mala praxis es reunir todas las evidencias posibles. Esto incluye:

  • Historias clínicas e informes médicos: Solicitar una copia completa de su historial médico y de los informes relacionados con el tratamiento en cuestión.
  • Pruebas y diagnósticos: Guardar todas las pruebas y diagnósticos realizados, como radiografías o estudios de imagen.
  • Facturas y recibos de los tratamientos.

     2. Solicitar un informe pericial

Es fundamental contar con un informe pericial, elaborado por un profesional independiente, que evalúe el caso y determine si efectivamente, hubo mala praxis. Este informe debe detallar los errores cometidos y el daño causado, relacionando error y daño, y será una pieza determinante en cualquier reclamación, ya que proporcionará una base científica y objetiva.

     3. Comunicación con la clínica dental

Antes de iniciar cualquier acción legal, es recomendable intentar resolver el problema directamente con la clínica dental. Puedes presentar una reclamación formal ante la clínica explicando los hechos y solicitando una solución, bien sea la repetición del tratamiento sin coste adicional, bien una compensación económica, o ambos.

     4. Reclamación extrajudicial

Antes de iniciar un procedimiento judicial, es recomendable intentar una reclamación extrajudicial. Esto puede implicar:

  1. Comunicación con la clínica dental: Antes de iniciar cualquier acción legal, es inexcusable reclamar previa y directamente a la clínica dental y, en su caso, al profesional implicado. Se recomienda un requerimiento vía buro fax ante la clínica, explicando, sucintamente, los hechos y solicitando una solución, ya sea la repetición del tratamiento sin coste adicional, una compensación económica, o ambos.
  2. Presentar una reclamación ante el Colegio de Odontólogos: Si la clínica no ofrece una solución satisfactoria, puedes presentar una reclamación ante el Colegio Oficial de Odontólogos y Estomatólogos de tu comunidad autónoma. Este organismo puede mediar en el conflicto y sancionar a los profesionales si considera que ha habido mala praxis. Dicha reclamación puede ser simultánea a la presentación de una demanda judicial.
  3. Procedimiento Judicial: Si la vía extrajudicial no da resultados, se puede y se debe acudir a los tribunales. Dependiendo de la gravedad del caso y el tipo de daño, se puede optar por:
    • Vía civil: Puedes interponer una demanda por responsabilidad civil reclamando una indemnización por los daños sufridos. Este procedimiento se basa en el artículo 1902 del CC, que establece la responsabilidad por daños causados por acción u omisión, y puede incluir tanto el daño físico como el moral y económico.
    • Vía penal: Para casos de negligencia que provoque lesiones graves o, incluso, la muerte, puede presentarse una denuncia o querella. Aquí se aplican los artículos 149 y 152 del CP que tipifican la imprudencia profesional. Afortunadamente son casos extraordinarios. La vía penal contempla la responsabilidad civil de la clínica y el profesional.

     5. Indemnización

En caso de que el tribunal falle a favor del paciente, se puede obtener una indemnización por los daños sufridos. La cuantía de la indemnización dependerá de varios factores, como la gravedad del daño, los gastos médicos adicionales, el impacto en la calidad de vida del paciente, entre otros. Una vez más, el informe pericial es determinante a estos efectos.

Importancia del consentimiento informado

Uno de los aspectos clave en los casos de mala praxis dental es el consentimiento informado. La Ley 41/2002 establece que los pacientes tienen derecho a recibir información completa y comprensible sobre su tratamiento, incluyendo los posibles riesgos y alternativas. Si un paciente no fue adecuadamente informado y dio su consentimiento basándose en información insuficiente o incorrecta, esto puede constituir un elemento importante en una reclamación por mala praxis. Ello se refiere tanto a la ejecución de tratamientos mal realizados, como a la falta de otros tratamientos necesarios, o el deficiente diagnóstico…

Ejemplos de casos de mala praxis dental

Para entender mejor cómo se aplica la normativa en casos reales, veamos algunos ejemplos:

  • Extracción incorrecta de un diente: Un paciente acude para la extracción de un diente y el dentista extrae el diente equivocado. Esto no solo causa un daño innecesario, sino que deja sin tratar el problema original. También, y muy habitualmente, puede afectar a nervios cercanos a la zona dental.
  • Implantes mal colocados: Un paciente recibe implantes dentales que no están correctamente alineados, lo que provoca dolor y la necesidad de repetir el tratamiento.
  • Infección postoperatoria: Un paciente desarrolla una infección grave después de un procedimiento dental debido a la falta de higiene y esterilización adecuada en la clínica.

Consejos para prevenir la mala praxis dental

Para minimizar el riesgo de ser víctima de mala praxis dental, es importante:

  • Elegir una clínica dental de confianza con profesionales debidamente cualificados. Asegúrate de que el odontólogo esté colegiado y tenga buena reputación.
  • Pedir siempre una segunda opinión si tienes dudas sobre el diagnóstico o tratamiento propuesto.
  • Asegurarte de recibir y comprender toda la información sobre los procedimientos antes de dar tu consentimiento. No firmes ni consientas nada sin entender completamente los riesgos y beneficios del tratamiento propuesto.

En conclusión, reclamar por mala praxis en clínicas dentales es un derecho de todo paciente que haya sufrido un daño debido a una actuación negligente. Conocer la legislación vigente, reunir las pruebas necesarias y contar con un buen asesoramiento jurídico son pasos fundamentales para llevar a cabo una reclamación exitosa. Si te encuentras en esta situación, la normativa española protege tus derechos como paciente y te proporciona mecanismos para obtener una indemnización justa en caso de mala praxis.